martes, 12 de octubre de 2010

hacerse mayor no es para nada facil, saber actuar de una manera formal aún sin que quieras actuar asi. Maduras, te enfrentas a echos desagradables y dejas de ser la bebé que hace poco lloraba en la cuna. Dejas de ser los zapatos recién estrenados, y empiezas a comprender que todo se desgasta incluso la novedad.
quieres que la gente te vea como tal, como una adolescente metida en un cuerpo de adulto y por más que te empeñas menos consigues. En vez de respeto y palabras corteses
me critican y rumorean que no soy más que una chiquilla con corazón de cartón, una chiquilla sin experiencias ni desgracias.
Estoy tan harta de adultos atolondrados y cagados. Cagados por asustarse ante una niña que de una manera culta te puede hacer la biblia en verso

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